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BEIJING, 15 may (Xinhua) -- El Ministerio de Educación de China emitió el lunes unas enmiendadas a la normativa relativa a las sanciones por engaños en exámenes nacionales en respuesta a la creciente tendencia a servirse de tecnología para este fin.
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BEIJING, 15 may (Xinhua) -- El Ministerio de Educación de China emitió el lunes unas enmiendadas a la normativa relativa a las sanciones por engaños en exámenes nacionales en respuesta a la creciente tendencia a servirse de tecnología para este fin.
El ministerio publicó las revisiones en su página web añadiendo 15 estipulaciones a las reglas, originalmente emitidas en mayo de 2004.
Según la cartera, las reglas han sido revisadas por primera vez en respuesta a "las nuevas circunstancias, problemas, tecnología y engaño masivo e incontrolado" en los exámenes, ya que la antigua normativa se había quedado obsoleta.
Se ha extendido el reglamento a fin de cubrir los exámenes de ingreso a programas de educación artística y física debido a la frecuencia con que en esas materias se producían violaciones en el proceso de matrícula.
Las nuevas reglas prohiben llevar equipos "capaces de enviar o recibir señales" en un examen, cuando anteriormente únicamente se prohibían los teléfonos móviles y otros equipos de telecomunicaciones.
La nueva normativa también clarifica el rol de las cámaras de vigilancia en la administración de exámenes, dado que estos equipos son una importante fuente de evidencias en caso de un eventual engaño.
Falsificar información personal de registro en un examen o perturbar el orden durante un examen serán asimismo prácticas susceptibles de sanción, dicen las revisiones.
En los últimos años, las ventas en Internet de equipos electrónicos u otro equipamiento usados para engañar en exámenes se han incrementado, produciéndose ocasionalmente filtraciones de contenido confidencial.
Prevenir el engaño se ha convertido, por tanto, en un "desafío serio" para el Ministerio de Educación, de acuerdo con su página web.
No obstante, los esfuerzos del ministerio han mostrado ya algunos resultados. La tasa de violaciones por engaño en los exámenes anuales para la admisión universitaria ha disminuido durante cinco años consecutivos.
La semana pasada, el ministerio anunció los resultados de una investigación referente a una filtración del contenido de una prueba durante la realización del examen nacional de postgrado de 2012, según la cual un miembro del personal educativo había revelado el contenido.
Las revisiones estipulan penalizaciones por engaño organizado realizado por profesores, así como por aquellos que faciliten el engaño revelando contenido de un examen. Asimismo, se estipula que los organizadores de un examen deben denunciar a los tramposos a sus escuelas, a las que se les pide que gestionen los casos e incluso lleven a cabo expulsiones.
Los trabajadores del gobierno que participen en engaños de examenes deberán ser "castigados severamente" por los departamentos de control disciplinario y supervisión, de acuerdo con las revisiones.
A cualquier persona que sea hallada realizando trampas en una examen nacional se le prohibirá que vuelva a presentarse al examen durante un plazo de uno a tres años posterior a la violación. Además, se ha enmendado un proceso de apelación para aquellos sospechosos de hacer trampas que rechacen las acusaciones, de acuerdo con las revisiones.
Un funcionario no identificado del Ministerio de Educación dijo que las enmiendas están diseñadas para "resolver los principales problemas en los exámenes nacionales y crear un sistema científico de administración de exámenes capaz de salvaguardar los derechos legítimos de los estudiantes y el personal".
El ministerio publicó las revisiones en su página web añadiendo 15 estipulaciones a las reglas, originalmente emitidas en mayo de 2004.
Según la cartera, las reglas han sido revisadas por primera vez en respuesta a "las nuevas circunstancias, problemas, tecnología y engaño masivo e incontrolado" en los exámenes, ya que la antigua normativa se había quedado obsoleta.
Se ha extendido el reglamento a fin de cubrir los exámenes de ingreso a programas de educación artística y física debido a la frecuencia con que en esas materias se producían violaciones en el proceso de matrícula.
Las nuevas reglas prohiben llevar equipos "capaces de enviar o recibir señales" en un examen, cuando anteriormente únicamente se prohibían los teléfonos móviles y otros equipos de telecomunicaciones.
La nueva normativa también clarifica el rol de las cámaras de vigilancia en la administración de exámenes, dado que estos equipos son una importante fuente de evidencias en caso de un eventual engaño.
Falsificar información personal de registro en un examen o perturbar el orden durante un examen serán asimismo prácticas susceptibles de sanción, dicen las revisiones.
En los últimos años, las ventas en Internet de equipos electrónicos u otro equipamiento usados para engañar en exámenes se han incrementado, produciéndose ocasionalmente filtraciones de contenido confidencial.
Prevenir el engaño se ha convertido, por tanto, en un "desafío serio" para el Ministerio de Educación, de acuerdo con su página web.
No obstante, los esfuerzos del ministerio han mostrado ya algunos resultados. La tasa de violaciones por engaño en los exámenes anuales para la admisión universitaria ha disminuido durante cinco años consecutivos.
La semana pasada, el ministerio anunció los resultados de una investigación referente a una filtración del contenido de una prueba durante la realización del examen nacional de postgrado de 2012, según la cual un miembro del personal educativo había revelado el contenido.
Las revisiones estipulan penalizaciones por engaño organizado realizado por profesores, así como por aquellos que faciliten el engaño revelando contenido de un examen. Asimismo, se estipula que los organizadores de un examen deben denunciar a los tramposos a sus escuelas, a las que se les pide que gestionen los casos e incluso lleven a cabo expulsiones.
Los trabajadores del gobierno que participen en engaños de examenes deberán ser "castigados severamente" por los departamentos de control disciplinario y supervisión, de acuerdo con las revisiones.
A cualquier persona que sea hallada realizando trampas en una examen nacional se le prohibirá que vuelva a presentarse al examen durante un plazo de uno a tres años posterior a la violación. Además, se ha enmendado un proceso de apelación para aquellos sospechosos de hacer trampas que rechacen las acusaciones, de acuerdo con las revisiones.
Un funcionario no identificado del Ministerio de Educación dijo que las enmiendas están diseñadas para "resolver los principales problemas en los exámenes nacionales y crear un sistema científico de administración de exámenes capaz de salvaguardar los derechos legítimos de los estudiantes y el personal".
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